Cómo criar a un hijo es algo que se va aprendiendo día a día, y en medio de todas las dudas y confusiones que surgirán, contarás con el sabio consejo de tu mamá y/o de otras mujeres que ya hayan pasado por esa experiencia de ser madre. Aunque eso sí, es importante que siempre te tomes dichas opiniones como consejos o como esas ganas de ayudar de los demás, pero mantente firme también cuando no estés de acuerdo con ellas y piensa que nadie aprende con las experiencias ajenas, sino con las propias.

 

No existen las fórmulas mágicas

Cuando se habla de pautas sobre crianza hay que tener muy presente que no existen ecuaciones que se puedan aplicar a cualquier caso dándose el mismo resultado. Pero sí que existen ciertas reglas generales que se pueden aplicar para tener una crianza exitosa. Toma nota de todas ellas:

  • En la práctica: mira cada momento del día como una oportunidad nueva para enseñar a tu bebé algo de la vida. Dar las gracias, compartir, ser solidario…, todas esas enseñanzas que se aprenden en la vida cotidiana.
  • Superar la adversidad: enseñar a un bebé a superar las dificultades es, sin duda, una de las mejores cosas que se pueden enseñar, ya que en la vida no todo nos sale a pedir de boca ni mucho menos. Sé su guía en la tranquilidad, en la verificación de opciones y en el volverlo a intentar.
  • Aprendiendo a aprender: siendo padres no se puede pretender estar siempre en el uso de la verdad y de la razón (todos somos humanos), por eso es importante que también sepamos recibir lecciones de los más pequeños, que tienen tanto que enseñarnos. Establece una relación familiar de enriquecimiento mutuo.
  • El valor del tiempo: educa a tu hijo en la enseñanza de que hay tiempo para todo (comer, dormir, jugar, etc.), así como en la importancia de saber controlar dicho tiempo.
  • Ensayo y error: no puedes pretender siempre que tu hijo/a haga perfectamente las cosas, y sobre todo si está empezando a hacerlas por primera vez. Muéstrale cuáles son los errores pero sin reproches, y así sabrá que equivocarse no es algo malo ni de lo que haya que avergonzarse.
  • Dar ejemplo: tu bebé aprende viéndote, así que en gran parte él o ella será un reflejo de lo que tú le muestres. Es por esto que debes fijarte mucho en el ejemplo que le das día a día.

 

Y sobre todo, recuerda siempre que el mejor consejo posible es el de criar a un hijo con mucho, mucho amor, ya que de esa manera las equivocaciones serán fáciles de enmendar y los obstáculos sencillos de superar.

crianza de un hijo